Ya hay fresas en la frutería, llega la temporada de naranja sanguina, está nevando (solo en las montañas, pero me vale)… Creo que esta semana he sido un poquito más feliz 😉 Y sí. Por fin mis naranjas favoritas han vuelto. Las mejores de Oviedo las encontraréis en Elíso Alimentación, sin ninguna duda. Aviso que este Bizcocho Invertido de Naranja Sanguina no será la última receta que veréis esta temporada. Incluso en ESTE ENLACE encontraréis unas cuantas recetas más para que podáis ir practicando.
Por desgracia, cada vez la temporada es más corta, hay menos y son más difíciles de encontrar. Es una variedad de naranja cuyo característico color rojo se activa con el frío, por lo que debido al cambio climático, cada vez hay menos producción y las que encontramos, ya no son tan rojas (o incluso negras) como las que podemos ver que se utilizan en las cocinas de los países nórdicos.
Os dejo este artículo de El País en el que la explicación al problema es un poco más científica de lo que os he contado yo.
Ya que se han convertido en un bien muy preciado y escaso, aprovechémoslas al máximo. Haciendo zumo, pero también preparando todas las recetas que podamos con ellas. Y os aseguro que este bizcocho os va a encantar.
Sencillo. Eso siempre. Y muy, muy jugoso.
Bizcocho Invertido de Naranja Sanguina
Fuente: Call Me Cupcake
Ingredientes:
- 100 gr de mantequilla
- 50 gr de yogur griego
- 1-2 naranjas sanguina
- 2 huevos M
- 140 gr de azúcar
- 120 gr de harina de todo uso
- 1 cucharadita (tsp) de levadura
- pizca de sal
- ralladura de 1 naranja sanguina
- 3 cucharadas (tbsp) de azúcar moreno
Elaboración:
- Precalentamos el horno a 175º. Forramos un molde desmontable de 22-23 cm
- Lavamos bien las naranjas y las cortamos en rodajas finas. Espolvoreamos el fondo del molde con azúcar moreno y cubrimos con las rodajas de naranja.
- Tamizamos harina, levadura y sal y reservamos.
- Fundimos la mantequilla y la añadimos al yogur. Mezclamos bien y dejamos templar.
- Batimos muy bien huevos y azúcar. Añadimos ralladura y la mezcla de yogur y mantequilla. Mezclamos bien.
- Por último, incorporamos la harina, y mezclamos con la ayuda de una espátula.
- Vertemos la mezcla en el molde y horneamos a 175º durante unos 40-45 minutos.
- Retiramos del horno. Dejamos reposar dentro del molde 5 minutos y luego pasamos a una rejilla para que se enfríe por completo.
¿Lo prepararéis este fin de semana? Espero que sí. Porque pasaré lista 😉
Natalia.