Si hay semanas para olvidar, ésta ha sido una de ellas. Días en los que lo único que he tenido en mente es todo el tiempo que llevo sin trabajar, la cantidad de decisiones erróneas que he tomado estos últimos años, la sensación de estar perdiendo el tiempo, de que los años se me van sin enterarme y en los que empiezo a darme cuenta que nunca volveré a tener lo que tuve, que posiblemente mi «carrera profesional», al menos tal y como yo la imaginaba, se ha acabado…
Que sí, sé que cada uno debe afrontar las consecuencias de las decisiones que toma, que no puedo quejarme, que tengo familia y pareja que están ahí para lo que necesite, que hay mucha gente en situaciones mucho peor que la mía, pero también sé que hay gente que está mejor, así que no consuela pensar eso. Y lo que tengo claro es que ésto no era lo que yo quería. Pero si de verdad la historia del karma es cierta, algo muy malo debí hacer en otra vida.
En fin, semana dura, muy dura, en la que lo único que me ha ayudado ha sido la cocina, últimamente mi pequeño refugio. Pero venga, que es viernes, la mayoría estáis de vacaciones, y no voy a venir yo aquí a contar mis penas, que al fin y al cabo, son mías.
Así que os dejo este bizcocho.
Preparación.-
Que sí, sé que cada uno debe afrontar las consecuencias de las decisiones que toma, que no puedo quejarme, que tengo familia y pareja que están ahí para lo que necesite, que hay mucha gente en situaciones mucho peor que la mía, pero también sé que hay gente que está mejor, así que no consuela pensar eso. Y lo que tengo claro es que ésto no era lo que yo quería. Pero si de verdad la historia del karma es cierta, algo muy malo debí hacer en otra vida.
En fin, semana dura, muy dura, en la que lo único que me ha ayudado ha sido la cocina, últimamente mi pequeño refugio. Pero venga, que es viernes, la mayoría estáis de vacaciones, y no voy a venir yo aquí a contar mis penas, que al fin y al cabo, son mías.
Así que os dejo este bizcocho.
Aunque con estos calores no apetece mucho encender el horno, merece la pena.
La receta original podéis encontrarla AQUÍ
BIZCOCHO DE YOGUR Y LIMA
Ingredientes.-
- 200 gr de harina
- 100 gr de Maizena
- 160 gr de azúcar
- 3 huevos M
- 40 gr de miel
- 200 gr de yogur natural
- 90 ml de aceite de girasol
- 1 sobre de levadura química tipo Royal
- ralladura de 2 limas
- zumo de 1 lima
Preparación.-
Precalentamos el horno a 160º
Tamizamos la harina junto con la levadura y la Maizena, y reservamos.
Batimos los huevos junto con el azúcar hasta que doblen su tamaño. Añadimos el aceite, poco a poco, y seguimos batiendo. Ahora, añadimos la miel y batimos de nuevo.
Incorporamos la mitad de la mezcla de harina, el yogur, el zumo y la ralladura. Batimos muy bien.
Por último, incorporamos el resto de harina y mezclamos.
Forramos o engrasamos un molde (yo he utilizado uno de 22cm desmontable). Vertemos la mezcla y horneamos a 160 durante 40-45 minutos, o hasta que al pinchar en el centro, el tester salga limpio.
Sacamos, dejamos unos minutos en el molde, y luego desmoldamos para dejarlo enfriar completamente sobre una rejilla.
Es un bizcocho suave, esponjoso y aunque no lo creáis, ligero. Y el toque de lima me encanta, refrescante y muy aromático, perfecto para estos días de calor.
Así que venga, a ver quién es el primero que se anima a prepararlo y me cuenta qué le ha parecido. ¿No es un buen desayuno de fin de semana?
¡Buen fin de semana a todos!
¡Hummm ….. bizcochoooo!, soy una apasionada de los bizcochos y este pinta muy bien.
Con este bizcocho seguro que la semana ha sido un poquito menos dura!!! Mucho ánimo Natalia y a seguir cocinando. 😉 🙂